Conozco la secuencia de memoria. Primero, el rugido de guerra que anuncia el inicio de las hostilidades. Después, los tirones que me dejan desnudo con el frío entumiéndome la piel. Y por último, las patadas. Una tras otra, todas empujándome al abismo hasta que logra tirarme, deshacerse de mi, marcar su territorio.
Es por eso que a veces la hago enojar con cosas sin sentido. Ella cree que me castiga haciéndome dormir en el sillón, y yo, con una felicidad casi evidente, acepto mi castigo sin reclamar.
Es por eso que a veces la hago enojar con cosas sin sentido. Ella cree que me castiga haciéndome dormir en el sillón, y yo, con una felicidad casi evidente, acepto mi castigo sin reclamar.
1 comentario:
Por qué tanto masoquismo???
Publicar un comentario